TERCER DÍA DE VIAJE: LA GALILEA YA NO TIENE SECRETOS PARA NOSOTROS

Nos están levantando realmente pronto; si ayer tocaban diana a las 06h00 porque había que dejar el hotel, con lo que ello supone de maletas, etc, hoy nos han dado un poco (pero sólo un poco) más de cancha: nos han levantado a las 06h30...

Pero es que no queda otra; si queremos ver cosas, tenemos que exprimirle al día todas las horas posibles. Tanto es así, que cuando hemos llegado a nuestra primera visita, el Monte de las Bienaventuranzas, ya había 4 autobuses que habían llegado antes que nosotros. ¡Aaaiiinnnssss!

El Monte de las Bienaventuranzas... lugar especial, donde se desarrolló el Sermón de la Montaña. Aquí el P. Stevie nos ha ofrecido una lectura y posterior reflexión sobre el significado de las Bienaventuranzas.

No van a faltar las fotos de grupo en esta Peregrinación

Aunque teníamos previsto celebrar aquí la Misa, nuestro equipo ha conseguido cambiarla y han podido reservar hora en Nazaret, en la Basílica de la Anunciación, a primera hora de la tarde.

Y nos hemos dirigido a Tabgha, lugar de la multiplicación de los panes y los peces, que en la actualidad es una iglesia benedictina.

Marcelo (guía), el P. Stevie y Eli (chófer). Nuestros Ángeles Custodios en esta bendita tierra

A la llegada a Tabgha, Marcelo nos ha explicado el simbolismo del lugar; cómo se desarrolló la situación en la que Jesús dió de comer "a 5000 hombres, sin contar a las mujeres y a los niños" con tan sólo 5 panes y 2 peces.

¡Qué bonitos mosaicos hemos visto!

Y de allí, a uno de los embarcaderos de Cafarnaum, a realizar una pequeña travesía por el Mar de Galilea, en la que hemos recordado con una lectura cómo Jesús hizo que los pescadores, que no habían conseguido pescar nada, volvieran a echar las redes y consiguieran pescar una cantidad inimaginable de peces. ¡Qué lectura tan bonita!

Por cierto, como de bien nacidos es ser agradecidos, no queremos olvidar hacer una mención especial al P. Fructuoso Aísa, Párroco del Carmen, por el magnífico libro de viaje que nos ha preparado, con oraciones, cantos y reflexiones, que nos están permitiendo disfrutar a tope de cada una de las visitas que estamos realizando.

Continuamos con nuestras visitas y le toca el turno a Cafarnaum.

Cafarnaum es un lugar con una importancia tremenda para los cristianos, por ser la población de origen de San Pedro, y uno de los primeros lugares donde Jesús desarrolló su Ministerio. Hemos visitado (lo que queda de) la casa de Pedro y la Sinagoga. Sus dimensiones indican la importancia que tuvo Cafarnaum, al igual que los restos de molinos de trigo que se conservan. Aquí, alrededor de la estatua de Pedro, hemos hecho otra de las fotos de grupo que haremos durante el viaje.

Hemos continuado visitando el Primado de San Pedro, con la iglesia de San Pedro o "Mensa Christi", lugar donde Jesús preparó los peces asados y el pan para sus discípulos. Y después de una lectura, hemos bajado a la orilla del Mar de Galilea, que está ahí mismo, con una agua dulce muy templadita... Como le gusta repetir a nuestro guía Marcelo, "si el Mar de Galilea pudiera hablar, ¿qué nos contaría?"

Y abandonando el Primado de Pedro, hemos continuado hacia el Kibbutz Ginosar, con un espectacular Centro de Congresos, donde nos aguardaba otra de las sorpresas del viaje: la visita de una barca de 2000 años de antigüedad, encontrada hace poco y conservada con unas medidas excepcionales. Primero nos han puesto un pequeño documental sobre cómo se encontró y cómo se trasladó desde su escondite milenario. Ha sido verdaderamente impresionante.

¡Ya tocaba comer! Nos hemos trasladado cerquita, a un restaurante preparado para grupos, donde nos esperaba el Pescado de San Pedro. ¡Exquisito!

Y ya comidos, carretera y manta hacia Nazaret (y tanto que manta, porque a las 14h30 y con este calorcito, ¿quién no se resiste a un sueñecito en el bus?). Al llegar, directos a la Basílica de la Anunciación, construída sobre la casa de María. Aquí se le apareció el ángel que le anunció la noticia de que había sido elegida para ser la Madre de Dios.

El lugar es impresionante. En la planta de arriba, donde íbamos a celebrar la Misa, tienen una gran colección de representaciones de la Virgen, de todo el mundo. La primera, la de España. Y algo que nos ha emocionado mucho, que representaba a nuestra Pilarica, sobre una columna, con el Apóstol Santiago y con la Basílica del Pilar de fondo. ¡Ole, ole y oleeeeee!

¿A que está siendo un día intenso y aprovechado? ¡Pues aún no hemos acabado! Nos dirigimos hacia la Iglesia de San José, construida sobre la antigua carpintería. Pero antes, ¿qué tal otra foto de grupo?

Y ya, para terminar, la guinda que todo pastel debe tener: al  llegar a Caná de Galilea, y después de tomar al asalto la tienda de una familia cristiana en la que vendían tooodo lo que un Peregrino puede demandar en la Tierra Santa, nos hemos dirigido a la Iglesia de Caná, de la Custodia Franciscana de la Tierra Santa, para que las parejas del grupo pudieran realizar, en una emotiva ceremonia, la Renovación de sus Promesas Matrimoniales. ¡Los pelos como escarpias, oigan!

Pues con todo lo que hemos hecho, aún hay quien tenía ganas de bailar ¡Lo estamos pasando tan bien!

Ahora sí, a descansar. Mañana nos esperan el Río Jordán, el Monte Tabor, Jericó, el traslado a Jerusalén.... Otro día intenso y emocionante, ¡seguro!